¿Qué son los quinchos cerrados sencillos?
Un quincho cerrado sencillo es una estructura semi o completamente cerrada, típicamente adosada a una vivienda o independiente, diseñada para compartir comidas, reuniones o descansar al aire libre. A diferencia de instalaciones de alto costo, estos apuestan por la funcionalidad y la practicidad ante todo.
Lo sencillo no significa pobre. Al contrario, hablamos de diseño eficiente: líneas limpias, materiales accesibles y construcción rápida. Pueden incluir parrilla, mesa, bancos integrados, cerramientos en vidrio o policarbonato, e incluso calefacción si se quiere extender su uso durante el invierno.
Ventajas de los quinchos cerrados sencillos
Elegir este tipo de quincho tiene más beneficios de los que aparenta:
Costo reducido. Usar madera tratada, perfiles metálicos o paneles simples abarata enormemente la obra. Instalación rápida. Se puede levantar en pocos días o semanas, incluso con sistemas modulares. Bajo mantenimiento. Al reducir la cantidad de materiales complejos o delicados, se simplifica su conservación. Versatilidad. Pueden cerrarse con toldos enrollables, vidrio, policarbonato o hasta lonas reforzadas, siendo adaptables al clima y gusto personal. Aumento de valor de la propiedad. Aporta un espacio extra útil y bien aprovechado al hogar.
Ideas y materiales para construir quinchos cerrados sencillos
Las principales decisiones a tomar al planear un quincho sencillo son los materiales y el grado de cerramiento. Algunas opciones populares:
Estructura de madera: clásica y económica. Puede envejecer bien con tratamiento adecuado. Hierro y chapa: industrial y resistente. Ideal para quienes quieren algo duradero y moderno. Perfiles de aluminio + policarbonato: sistema liviano pero visualmente limpio. Ideal para cerramientos transparentes. Vidrio corredizo o paneles móviles: permiten abrir o cerrar según el clima del día.
Para el interior, lo más simple suele ser lo más efectivo: una mesa robusta, bancos rústicos, iluminación cálida y una parilla empotrada. Algunos suman un sector tipo barra o una isla de apoyo.
Quinchos cerrados sencillos en espacios reducidos
No hace falta tener un gran jardín para disfrutar uno. De hecho, quienes tienen patios pequeños o terrazas también pueden instalar versiones compactas. Acá, la clave está en el diseño:
Usar puertas corredizas para no robar espacio útil. Mesas plegables o muebles con doble función (baúlasiento, por ejemplo). Cerramientos móviles que se abren por completo en días cálidos. Techos livianos como toldos tensados o paneles retráctiles.
En barrios urbanos, donde los espacios verdes son limitados, este tipo de proyectos se ha vuelto muy común y bien valorado.
Consejos al diseñar quinchos cerrados sencillos
Para que el resultado cumpla con lo esperado, conviene seguir algunos consejos prácticos:
Planificar según orientación solar y vientos. Evitar lugares muy expuestos si se busca comodidad durante todo el año. No sobrecargar de elementos. Mientras más simple, mejor se disfruta y más fácil es mantenerlo. Dejar ventilación adecuada si se incluye parrilla o cocina. Considerar iluminación natural: tragaluces, paredes traslúcidas o ventanas grandes. Usar colores neutros y materiales fáciles de limpiar.
Un buen quincho debe ser funcional, acogedor y fácil de habitar, sin excesos.
Mantenimiento y uso eficiente
El mantenimiento en los quinchos cerrados sencillos es relativamente bajo, pero conviene establecer ciertos hábitos:
Revisar sellos y cierres antes y después del invierno. Tratar maderas expuestas con barnices o aceites protectores al menos una vez al año. Limpiar techos tras lluvias largas para evitar acumulación de hojas o residuos. Reorganizar el espacio según estaciones: más abrigado en invierno, más abierto en verano.
Además, se pueden sumar mejoras con el tiempo: estufas a leña, ventiladores de techo, altavoces bluetooth o luces LED regulables.
Inspiración visual y tendencias
Estéticamente, los quinchos cerrados sencillos están adoptando un estilo cada vez más minimalista. Techos planos, muebles sin adornos excesivos, usos de hormigón visto, madera natural o metal negro.
Las versiones con cerramientos transparentes también se ven mucho, ya que permiten disfrutar del exterior incluso en pleno frío, sin perder vistas ni iluminación.
Redes sociales como Pinterest o Instagram están llenas de ideas visuales. Podés empezar con una estructura básica y luego sumar componentes cada año.
Conclusión
Los quinchos cerrados sencillos demuestran que no hace falta una gran obra ni un presupuesto desmedido para ganar un espacio extra de calidad. Bien diseñados, se integran al entorno, sirven todo el año y multiplican las opciones para compartir con familia o amigos. Ya sea en un patio grande o una terraza modesta, valen cada metro cuadrado.


